14 junio 2007

El Vaticano contra Amnistía Internacional

No puedo decir que me haya sorprendido, aunque sí cabreado, la noticia de que el Vaticano haga un llamamiento al boicot contra Amnistía Internacional. La excusa (aunque la Iglesia nunca ha necesitado demasiadas excusas para oponerse a los Derechos Humanos) es, esta vez, que AI apoya en determinadas circunstancias el aborto.
La política de Aministía Internacional en este tema, parece ser la de garantizar el acceso a los servicios legales y médicos seguros para el aborto a todas aquellas mujeres cuyo embarazo se deba a una violencia sexual o a incesto, o en caso de que conlleve un riesgo para su vida o su salud. Lo cual no parece una invitación ni siquiera al aborto libre o a su generalización. Al contrario, es una postura extremadamente prudente y restrictiva.

Sin embargo, lo que llama más la atención del comunicado eclesiástico es el contraste con los silencios de la Iglesia en otros temas e incluso la complicidad con los regímenes más sanguinarios, con los campeones mundiales de la tortura cuando éstos se declaran católicos (Podemos citar al bendecido Pinochet, al Franco bajo palio y seguir con una larguísima lista. Qué aburrimiento).
¿No tiene ningún boicot que proponernos el papado en torno a la situación de Guantánamo? ¿No hay preparada ninguna excomunión contra los líderes de las Azores? ¿No deberíamos evitar el consumo de productos de países en los que existe la pena de muerte? El Vaticano, mudo frente a estos temas, sólo propone una condena: contra quienes luchan (a veces jugándose el cuello) a favor de la dignidad humana y los derechos fundamentales de la persona; contra quienes, le guste o no a Ratzinger, son más fieles al verdadero espíritu de un evangelio que la jerarquía eclesiástica parece haber olvidado.
A partir de hoy, en este blog existe un vínculo (no sólo informático, también emocional) con Amnistía Internacional, como podéis comprobar en la columna de la derecha (con perdón).

05 junio 2007

Mentiras de ETA, mentiras del PP

"ETA ha vuelto a equivocarse", ha dicho el presidente del gobierno al conocer el comunicado de la banda en el que anuncian el final del alto el fuego permanente. Estoy de acuerdo. Pero en este post quiero centrarme en resaltar algunas mentiras que han rodeado todo este proceso.

Por parte de ETA, son innumerables: Mentira que pretendiera un final dialogado de la violencia. Sólo quería la aceptación total de sus planteamientos, sin margen alguno para la negociación. Una actitud muy poco inteligente y muy poco democrática (que, por cierto, también acostumbra a tener el PP).

Mentira que rompan ahora la tregua con un comunicado. La rompieron en la T4 de Barajas cuando asesinaron a dos ciudadanos (da igual de qué país) en un atentado.

Mentira todas las declaraciones que habían venido haciendo sobre presuntos compromisos inclumplidos del gobierno democrático de España. Sólo pretendían aparecer ante sus bases como víctimas y no culpables de la ruptura del proceso.

Mentira casi todo lo que dicen en su comunicado, que se refiere a un mundo de fantasía, un mundo que tal vez les gustaría que existiera, pero que no tiene ningún refrendo en la realidad. Como muestra, basta un botón: "Renovamos nuestra decisión de defender con las armas al pueblo que es agredido con las armas". Se comenta por sí solo.

Pero también han venido mintiendo el PP y sus terminales mediáticos. Las falsas cesiones, los falsos compromisos, las falsas rendiciones... todo queda ahora meridianamente expuesto a la luz. Nunca hubo tales cesiones, porque el gobierno se mantuvo firme en la defensa de la legalidad constitucional. ETA ha roto la tregua precisamente por ello: porque ha visto que nada puede apartar al Estado de la vía democrática y de la aplicación de la ley, porque no ha conseguido ninguna cesión por parte de un gobierno firme y democrático.

Los electores navarros, por ejemplo, lo han visto claro, dando un apoyo mayoritario a las fuerzas que se opusieron a la dialéctica guerracivilista de Rajoy y adláteres.

Quienes han acusado a Zapatero de rendirse ante ETA deberían pedirle perdón, en público y en privado.